Hemorragia intracerebral (HIC)

La hemorragia intracerebral (HIC), también conocida como ataque cerebral hemorrágico, es una emergencia médica en la que se produce una hemorragia dentro del propio tejido cerebral. A diferencia de los ataques cerebrales isquémicos, causados por una obstrucción de la circulación, la HIC es causada por una rotura de un vaso sanguíneo. Esto produce una hemorragia interna repentina y un daño cerebral potencialmente grave.

Reconocer los síntomas de la HIC y buscar atención médica inmediata es fundamental para mejorar los resultados.

Llame al 911 de inmediato si usted o alguien que conoce tiene síntomas de hemorragia intracerebral.

Causas y factores de riesgo de hemorragia intracerebral

Varios factores aumentan el riesgo de HIC, entre ellos:

• Presión arterial alta: La hipertensión arterial crónica es la principal causa de HIC.
• Edad: Una HIC es más común en personas mayores de 55 años.
• Género: Los hombres, o las personas asignadas como varones al nacer, tienen más probabilidades de tener una HIC que las mujeres.
• Traumatismo en la cabeza: Las lesiones cerebrales pueden dañar los vasos sanguíneos, lo que lleva a una hemorragia en el cerebro.
• Anticoagulantes: Ciertos medicamentos pueden aumentar el riesgo de hemorragia.
• Enfermedad hepática: Puede afectar la coagulación sanguínea y aumentar el riesgo de HIC.
• Abuso del alcohol: El consumo crónico de alcohol debilita los vasos sanguíneos.

Hay afecciones subyacentes específicas que también pueden causar HIC, incluyendo:

• Malformaciones arteriovenosas (conexiones anormales entre arterias y venas)
• Tumores cerebrales
• Lesiones en la cabeza

Las medidas preventivas desempeñan un papel crucial a la hora de minimizar el riesgo de HIC. Gestionar y controlar la presión arterial alta, abordar los padecimientos de salud subyacentes y adoptar un estilo de vida saludable contribuyen a la prevención.

Staying up to date on your physical exams can aid in early detection and identifying potential risk factors.

Síntomas de la hemorragia intracerebral

Los síntomas de la HIC incluyen:

• Confusión
• Dolor de cabeza
• Letargo
• Pérdida del conocimiento
• Náuseas o vómitos
• Ceguera temporal
• Debilidad o entumecimiento repentinos (a menudo en un lado)
• Convulsiones

Diagnóstico de hemorragia intracerebral

Si se sospecha una HIC, el proveedor le hará un examen físico y solicitará pruebas por imágenes digitales, que incluyen:

• Tomografía computarizada
• MRI
• Radiografías

Opciones de tratamiento para la hemorragia intracerebral

Los planes de tratamiento para la HIC tienen como objetivo abordar el hematoma y prevenir daños mayores. Las opciones de tratamiento pueden incluir:

• Cirugía: En algunos casos, puede requerirse una cirugía tradicional para drenar la sangre o reparar los vasos sanguíneos dañados.
• Drenaje del líquido que rodea al cerebro: Esto crea espacio para que el hematoma se expanda sin dañar las células cerebrales.
• Medicamentos: Se usan medicamentos para controlar la presión arterial, las convulsiones o los dolores de cabeza.
• Catéter: Se pasa un tubo largo y delgado a través de los vasos sanguíneos hasta llegar al área afectada.
• Terapia de rehabilitación: Terapias como la fisioterapia y la terapia del habla pueden ayudarle a recuperar funciones cerebrales (como la capacidad de hablar) afectadas por el sangrado.

Recuperación después de una hemorragia intracerebral

La recuperación tras una HIC requiere un enfoque integral, que incluye la rehabilitación. La duración de la recuperación depende de diversos factores, que incluyen el tamaño del sangrado, la rapidez con la que se administró el tratamiento y cualquier afección subyacente.

El proveedor puede incluir programas de rehabilitación, como fisioterapia, terapia ocupacional y terapia del habla, en el plan de recuperación.

Complicaciones de una hemorragia intracerebral

Las complicaciones asociadas con la HIC pueden incluir déficits neurológicos a largo plazo, deterioros cognitivos y dificultades en el funcionamiento diario.

La atención médica oportuna junto con los esfuerzos de rehabilitación puede ayudar a reducir las complicaciones y mejorar los resultados generales de las personas afectadas por una HIC.