Síntomas y tratamiento de la malformación vascular espinal

Las malformaciones vasculares son vasos sanguíneos anormales. Cuando se forman en la médula espinal o cerca de ella, se denominan “malformaciones espinales”. Hay 3 tipos comunes: malformaciones arteriovenosas (MAV) espinales, fístulas arteriovenosas (FAV) y malformaciones cavernosas. Las malformaciones vasculares espinales son poco frecuentes, pero pueden ser graves. Si no se tratan, pueden dañar permanentemente la médula espinal y causar parálisis en casos graves.

Síntomas de las malformaciones vasculares espinales

Los síntomas de las malformaciones vasculares espinales varían. Las malformaciones arteriovenosas (MAV) espinales interfieren con la circulación sanguínea normal. Esto puede hacer que las arterias y venas se rompan y derramen sangre dentro de la médula espinal. Las MAV también pueden presionar la médula espinal y causar dolor. Las fístulas arteriovenosas (FAV) pueden obstruir las venas, reducir el suministro de sangre oxigenada a otras partes del cuerpo y causar inflamación en la médula espinal.

Las malformaciones cavernosas son grupos agrandados de vasos que filtran sangre hacia la columna vertebral.

Algunas personas no experimentan ningún problema. Otras personas tienen síntomas que aparecen repentinamente y empeoran con el tiempo. Los primeros síntomas de estas malformaciones pueden incluir:

• Problemas de equilibrio o coordinación
• Dificultad para caminar o subir escaleras
• Mareo
• Dolor de cabeza
• Sensaciones extrañas, como sensación de ardor o calor
• Entumecimiento, hormigueo o dolor repentino en las piernas
• Debilidad en uno o ambos lados del cuerpo

A medida que avanza la afección, también podría experimentar:

• Disfunción eréctil (en hombres)
• Falta de sensibilidad en las piernas
• Dificultad para controlar los intestinos o la vejiga
• Dolor lumbar
• Sensibilidad a la luz
• Convulsiones
• Rigidez en la nuca

Diagnóstico de la malformación vascular espinal

Para diagnosticar una malformación vascular espinal, podría necesitar una resonancia magnética (MRI) o una tomografía computarizada (TC). A veces, estas pruebas se realizan junto con una angiografía espinal, en la que se inyecta un medio de contraste en los vasos sanguíneos para ver la circulación sanguínea en la imagen de prueba.

Opciones de tratamiento para las malformaciones vasculares espinales

Los tratamientos más comunes para las malformaciones vasculares espinales son:

• Embolización endovascular: El médico le insertará un pequeño tubo en los vasos sanguíneos para sellar la malformación.
• Radioterapia: Este tratamiento reducirá la malformación.
• Cirugía: Podría ser necesario si la malformación ya ha sangrado o está afectando la médula espinal.

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